Me encanta ese sonido de los niños cantores de San
Ildefonso, que acompañan con su soniquete la mañana de los millones, y millones de personas que
sueñan y hasta que no sale el “gordo” no pierden la esperanza de que sea su número,
es verdad que con las pesetas sonaba mejor…. Bueno para los que ya tenemos unos
añitos porque, al igual que yo muchos (por no decir todos) en cuanto compramos
un numero de lotería hacemos lo mismo, 27.345 trescientos milllonessssssss de
peseeeeeetaaaasss, y claro la generación euro, te mira y piensa uff queda mejor
con los euros….
Pero vamos a lo “gordo” al premio, cuanta gente no se ha
imaginado saliendo por el telediario hablando con los reporteros y una botella
de cava o sidra… brindando y diciendo pues no se algo llevo pero aún no se cuánto,
me ha llamado mi amiga y me ha dicho bájate que ha tocado en la carnicería y
aquí estamos!!!! Y de fondo todo el mundo al que le ha tocado o simplemente que
pasaba por allí, cuantas veces no hemos escuchado, vaya yo me quede sin el número….
Yo todos los años tengo la esperanza que me toque, y de
verdad que creo que me va a tocar que luego cundo veo que no lleva ni la
pedrea, me da un bajón… de verdad,
siempre pienso este año toca, pero nada, me encantaría poder gritar ¡Me ha
tocado la lotería! Pero claro un buen premio, vamos uno de los tres primeros,
porque si me toca del resto seré muy feliz pero no lo gritare, porque antes de
cobrarlo ya lo tengo gastado….
A mi ver a los niños de San Ildefonso me encanta, oír el
ruido del bombo dando vueltas, me recuerda a cuando era niña y era el comienzo
de las navidades, y a mi padre, que le encantaba escuchar el sorteo, muchas
veces me decía, escucha el sorteo por la radio y apunta los números de los
premios gordos, la ilusión que le habría hecho a él llevar alguna vez un premio
aunque no fuese muy grande, esa es la ilusión que me ha transmitido siempre y
que año tras año yo tendré.
Mi numero favorito es el 13 y sabéis que pese a ser un
numero de mala suerte, es de los primeros que se acaban, y nunca ha salido
premiado, la terminación que más veces ha ganado es 85, por supuesto el 5 es la terminación que ha salido en 32 ocasiones
de los 202 sorteos, ya que el sorteo de navidad comenzó en 1812 y no se interrumpió
ni durante la guerra civil, claro que el precio del boleto y los premios han
ido evolucionando, este es el primer año en el que Hacienda se va a llevar un
20% del premio, es decir que de los 400.000€ que tocaban el año pasado por décimo
(fue el gordo más gordo) este año cada decimo esta agraciado con 320.000€.
Las fases del sorteo, para que todo sea legal son:
Primero el recuento de bolas, un día antes, es decir hoy se
han examinado públicamente todas las bolas del sorteo, por un lado los premios
y por otro los números, estas bolas son de madera de boj que es ligera y resistente
pesando todas las bolas lo mismo (pesan 3 gramos y tienen un tamaños de 18,8
mm) y los números están grabados a laser para que no haya diferentes pesos por
la pintura. Cuando se termina el recuento, todas las bolas entran en 200 liras
con 500 bolas cada una, se desaloja el salón y se aseguran todos los
accesos dando las llaves a tres personas diferentes.
Mañana día 22 de diciembre, las puertas del salón se abren a
las 8:00 y la entrada es libre, hasta llenar aforo, a las 8:30 se forma la
junta que preside y autoriza el sorteo y se enseñan las bolas al público, todas
las liras cuelgan de un paraguas para volcarlas a la tolva que es el recipiente
que se utiliza para transportar las bolas hasta los bombos, cuando ya están todas
las bolas dentro del bombo se cierran y a una señal del presidente se voltean simultáneamente.
Sobre las 9:15 empieza el sorteo, salen 4 niños del colegio de San Ildefonso,
empiezan a caer deslizarse las bolas por la trompeta hasta la copa, que es
donde uno de estos niños coge una bola con el premio y el otro con el número
agraciado y las van colocando en las tablas por orden de salida, cada tabla
consta de 200 bolas dispuestas en 10 alambres. Los bombos solo giran cuando se
llena cada alambre. Y así hasta que se terminan las bolas de los premios que es
cuando finaliza el sorteo.
Luego un equipo de unas 40 personas realizan la lista de
premios y de los lugares agraciados, así a los 45 minutos más o menos de
terminar el sorteo se comprueba varias veces y se entrega a la Fábrica Nacional
de Moneda y Timbre para que la reparta a los medios de comunicación y a las administraciones
de lotería.
Las tablas con los números premiados, quedan expuestas
siete días al público. Transcurrido este tiempo, son abiertas y las bolas
contadas y examinadas nuevamente, para cualquier otro sorteo posterior a
celebrar por este sistema.
Yo ahora estoy emocionada y preparada para madrugar mañana y
no perderme detalle del sorteo, con la ilusión de pillar algo.
Os dejo con el calvo, que era el que más ilusión nos traía a
todos, tendría que volver todos los años como El Almendro, a nuestra casa por
Navidad.
Os deseo mucha suerte y que la salud nunca falte, que es como
muchos llaman al día de mañana, el día de la salud.
La frase de ayer era de la película princesas como ha dicho
La lágrima del guardián, animaros todos a participar, esta canción en muy
navideña, animaros todos.
“¡Cuatro
series!, ¡qué bonitas!
¡Voy tirando los
caudales!
¡Son de doña Manolita!
¿Quién me compra esta
penita?
¡Mañana, mañana sale!"
Que os vaya bonito.